Acción urgente

Red integrada por miles de personas que suman su capacidad de presión para detener una violación de derechos humanos, enviando cartas, faxes y mensajes de correo bajo un modelo de apelación previamente preparado. Estas comunicaciones son enviadas lo más rápidamente posible a los actores competentes y pertinentes, cuando se tiene noticia de que una o más personas se encuentran en extrema situación de riesgo. Amnistía Internacional ha trabajado y perfeccionado este procedimiento de protección desde más de 40 años y ha podido comprobar que en aproximadamente una tercera parte de los casos se ha producido una mejora en la situación de las víctimas. Amnistía cuenta hoy con una red de acción urgente de 90.000 personas que actúan a un llamamiento rápido para ayudar a quienes corren peligro de sufrir torturas o malos tratos, o a presos cuyas vidas están amenazadas en cualquier parte del mundo.