Estado de pérdida o debilitamiento de capacidades para enfrentar y dominar un evento, situación o proceso con la fuerza suficiente para herir o dañar, crear adversidades, afectar el bienestar o el curso de los proyectos y labores, como consecuencia de contextos restrictivos, discriminatorios o violatorios de derechos. Se refiere a una situación que puede modificarse y no a una condición inherente a las personas o grupos. Ninguna persona es vulnerable por sus características o conductas personales, culturales o sociales. Las vías para superar vulnerabilidades es concentrar esfuerzos en restituir los derechos negados o restringidos, obteniendo durante la marcha de estos esfuerzos y como resultado de ellos, la mayor autonomía de las personas o grupos para dominar los eventos, situaciones o procesos relacionados con las características o conductas restringidas, discriminadas o violentadas.